BIENVENID@ A NUESTRO ESPACIO
Rincones creados para recordar, sentir y transformar. Un viaje por espacios que abrazan el cuerpo, despiertan la memoria y celebran la vida.
Al cruzar el umbral de Nuestro Espacio, entras en un lugar que no solo se habita con el cuerpo, sino también con el corazón. Aquí, cada rincón ha sido creado con intención: para acoger, para sostener, para despertar memorias que viven en la piel.
Nada es casual. Cada detalle —los materiales, los aromas, la luz, el silencio— forma parte de una experiencia que va más allá del masaje. Aquí, el tacto es un lenguaje sagrado. Nos guía hacia el reencuentro con el cuerpo como templo, con el instante como verdad, con el cuidado como acto de amor.
Recepción y Sala de Clientes
Un primer abrazo al llegar. En este espacio te invitamos a detenerte, a dejar que el ritmo se suavice. Aquí puedes degustar tés aromáticos o refrescarte con agua, mientras el murmullo de nuestra fuente acompaña tu respiración.
La sala está inspirada en la antigua tradición de reunirse alrededor del fuego: un lugar para mirarse, conversar y compartir. Nuestra mesa central es ese fuego simbólico, y las velas que la iluminan son su llama viva.
Es un rincón para que el cuerpo empiece a relajarse y el alma sienta que ha llegado a casa.
Templo Shen
Es un refugio de serenidad creado para invitarte al silencio interior y a la calma profunda. Su diseño minimalista y su atmósfera zen te envuelven en un ambiente donde el tiempo se detiene y el cuerpo se rinde a la quietud.
Cuenta con dos futones, ideales para experiencias en pareja o sesiones compartidas, donde la complicidad y la confianza se vuelven protagonistas. La suavidad de los tejidos, la luz cálida y la armonía del espacio transforman cada encuentro en un ritual de conexión.
Más que una sala, el Templo Shen es una invitación a descubrir que la paz que buscas siempre ha habitado en tu interior.
Sala Plenitud
Es un espacio concebido para honrar lo sagrado de lo femenino y abrir las puertas a la abundancia del ser. Aquí, el futón se convierte en altar y en cada encuentro traemos el cielo a la tierra.
Inspirada en la energía de las grandes diosas —Isis, Tara, Yemayá, María Magdalena, Gaia y Lakshmi—, esta sala invoca la fuerza de lo ancestral, la dulzura del cuidado y la sabiduría del amor infinito. Su atmósfera envolvente te invita a entregarte, a recibir y a recordar que el cuerpo es templo y receptáculo de luz.
En Plenitud, la experiencia trasciende lo físico: es un ritual donde lo divino femenino fluye en cada detalle, despertando la belleza interior y celebrando la vida en todas sus formas.
Sala Sueños
Es un lugar donde lo invisible toma forma y el descanso se convierte en un viaje interior. Dos camillas esperan para sostener el cuerpo y permitir que la mente se abandone, mientras la atmósfera suave abre espacio a la introspección.
Atrapa-sueños rodean la sala, símbolos de protección y de guía que nos recuerdan que cada sueño guarda un mensaje y que cada propósito tiene un latido propio. Su presencia crea un ambiente mágico, como un puente entre lo terrenal y lo espiritual.
La luz tenue y envolvente acaricia cada rincón, invitando a soltar, a entregarse y a escuchar la voz interior. En esta sala, los sueños despiertan para mostrarte el camino hacia lo que tu corazón anhela.
Sala Vida
Es un espacio que honra lo esencial, un recordatorio de que cada instante puede ser vivido con presencia y verdad. Aquí, el cuerpo se relaja y el alma respira, permitiendo que florezca lo auténtico en cada persona.
La vida es un viaje a la autenticidad, y este espacio invita a recorrerlo sin máscaras ni prisas, con la certeza de que ser uno mismo es el mayor regalo.
Rodeados de plantas, la sala se convierte en un pequeño oasis, un guiño a la fuerza y la belleza de la vida misma. El verde que acompaña cada rincón inspira calma, frescura y conexión con la naturaleza.
En este entorno, todo vibra al ritmo del crecimiento, del renacer y de la plenitud de estar vivos.
Sala La Esencia de Al-Andalus
Nace como un homenaje a nuestra historia ancestral, un espacio donde la memoria se entrelaza con el presente y nos recuerda que somos parte de una raíz profunda. Inspirada en la riqueza cultural y espiritual de Al-Ándalus, cada detalle evoca armonía, belleza y contemplación.
Es una sala que invita a la conexión con los ancestros, a honrar la sabiduría de quienes caminaron antes que nosotros y a reconocer en sus huellas la fuerza que hoy nos sostiene. Sus formas, aromas y matices despiertan un sentir íntimo, casi ritual, que abre la puerta a la introspección y al recuerdo.
Aquí, el cuerpo se relaja, la mente se aquieta y el alma encuentra un puente con su linaje más sagrado.